El día de ayer ambas cámaras legislativas clausuraron su último periodo ordinario de sesiones sólo con una ceremonia protocolaria. Por desacuerdos entre partidos, en el camino quedaron temas de trascendencia histórica, como la eliminación del fuero y la desaparición de la figura del arraigo que, en medio de una expectativa mediática, avalaron los diputados pero no alcanzaron a pasar en el Senado.
A pesar de los rumores y especulaciones de última hora, los senadores tampoco lograron pactar los nombramientos del nuevo fiscal general de la República ni del fiscal anticorrupción, debido a que primero es necesario el diseño de la nueva Ley Orgánica de la Fiscalía General.
Sin embargo, en medio de fuertes discusiones, lograron aprobar otros grandes temas, como el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (TPP-11), la nueva Ley de Comunicación Social o de la regulación de la publicidad gubernamental– y el Derecho de Réplica, con lo que atendieron dos mandatos de la Suprema Corte. También la esperada Ley de Archivos y los nombramientos de los dos nuevos comisionados del INAI. Aunque las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, de Justicia, de Reforma del Estado y de Estudios Legislativos se declararon en sesión permanente para analizar las “observaciones” que diversos senadores realizaron a la minuta que envió la Cámara de Diputados para eliminar el fuero constitucional, el coordinador de los debates, el priista Enrique Burgos, dijo que “el tema se revisará con mayor profundidad”.
El presidente del Senado, el panista Ernesto Cordero, adelantó, “no sé dónde quedará el tema del fuero, lo único que puedo decir es que la minuta que llegó de la Cámara de Diputados no estaba en condiciones de aprobarse, de acuerdo con la opinión de los expertos.
Agregó también que “eso se tiene que entender, y le hubiéramos hecho un daño al país aprobando algo donde los expertos te están sugiriendo que no lo aprobaras. Eso se tiene que entender”. Compartió la idea de que los diputados aprobaron este tema por unanimidad, más por una cuestión político-electoral, “porque hay cosas que generan un aplauso fácil”.
A pesar de la justificación y urgencia de la Cámara de Diputados de desaparecer también la figura del arraigo al señalar que “transitó de ser una medida precautoria o cautelar ordinaria a una excepcional por la carga de arbitrariedad que representa, y de que la Suprema Corte señaló su absoluta y abierta anticonstitucionalidad e inconvencionalidad”, sencillamente el Senado consideró que el tiempo ya no le alcanzó para procesar esta reforma al 16 constitucional en comisiones ni mucho menos en el pleno.
Sobre la designación de los contralores internos del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), los diputados admitieron que no hubo acuerdos entre partidos. Y para atender los pendientes, el líder del PRI en el Senado, Emilio Gamboa; el presidente de la Mesa Directiva, el panista Ernesto Cordero, y el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Marko Cortés, del PAN, indicaron que “de alcanzar acuerdos en algunos temas, está abierta la posibilidad de convocar a un periodo extraordinario de sesiones” aunque diversos legisladores coincidieron que sería hasta después de las elecciones, si hay condiciones.
