Tlaxcala, Tlax. La reciente convocatoria para la creación de la Compañía Estatal de Teatro ha despertado opiniones divididas entre la comunidad teatral, la mayoría entorno a las ambigüedades que la envuelven. Como los requisitos, dirigentes y la dignificación del arte.
El 3 de enero 2023, el Secretario de Cultura, Antonio Martínez Velázquez hizo público que se encontraba trabajando -desde hace meses- en «un gran proyecto de teatro para el estado con la compañía del actor tlaxcalteca Ausencio Cruz», aunque nació en Monterrey en 1955 y se le recuerda por el programa La Caravana que dirigió, escribió y produjo con Víctor Trujillo, conocido por su famoso personaje misógino Brozo.
También se anunció la participación de Giovani Magaña como asesor técnico de la compañía, quien es conocido en la comunidad teatral por ser el director de más de 3 plagios de musicales sin contar con la capacidad ni preparación para crear cosas nuevas.
El anuncio de estos dos perfiles despertó interrogantes en la comunidad teatrera, pero no llegó a más hasta que se publicó oficialmente la convocatoria el 1° de marzo para formar parte de la Compañía Estatal de Teatro.
Convocatoria para la Compañía Estatal de Teatro y sus ambigüedades
Los principales objetivos de la Compañía Estatal de Teatro, son:
- Propiciar el desarrollo artístico de profesionales de forma colectiva e interdisciplinaria.
- Dignificar la profesión teatral y permitir la estabilidad creativa.
- Abordar temáticas sociales contemporáneas a través de lenguajes escénicos inclusivos y diversos -de orígenes étnicos, sexual- y perspectiva de género.
Pero veamos qué dicen las letras chiquitas de la convocatoria que ha leído con lupa el gremio teatral. Sobre la dignificación de la profesión, es lo que menos lee en la convocatoria por parte de las autoridades responsables.
Vayamos a esta declaración del Secretario:
«Hemos escuchado y tomado en cuenta las opiniones de la comunidad teatral y decidimos crear esta compañía que estará conformada y dirigida por tlaxcaltecas”.
No obstante, se tomó la decisión de «mandar a traer» a personas que no han trabajado por ni para Tlaxcala, o ni siquiera viven dentro del estado. Personas que vienen a ocupar espacios de decisión -y de poder-. Además, que se trata de dos hombres, situación que a las creadoras escénicas del estado les hace ruido.
Así lo dijo una artista local, Sagui Bahena:
«El ámbito de la cultura y las artes es patriarcal, violento y abusivo».
Condiciones de colaboración indignas
El «apoyo» es condicionado a la solvencia de la dependencia -o sea, un pago y/o sueldo irregular-. Aunque los aspirantes deben firmar una carta compromiso de disponibilidad, sin que los representantes gubernamentales pongan el ejemplo con la corresponsabilidad.
«Cuando se emplea el concepto ‘estímulo económico’, ya sabes que te quieren explotar», comentó en redes sociales Raquel Miró.
Tampoco se estipulan tiempos, pero sí solicitan disponibilidad para ensayos y funciones. Eso sí, sin paga ni un sueldo estable -hasta concluir las funciones-. La convocatoria responde a las personas que la presentan, no piden preparación porque no la tienen.
Ausencio Cruz, sin conocimiento teatral
El próximo dirigente de la Compañía Estatal de Teatro se reunió el jueves pasado con artistas teatrales. Afirmó conocer «muy bien» el gremio estatal -sin vivir en Tlaxcala y sólo con familia en Zacatelco-.
Definió que la intención de la compañía era atraer «carros de turistas» para ver las obras de Miguel N. Lira, obras que están agotadas en Tlaxcala, de donde es oriundo el autor, por falta de re-ediciones -mas que la reciente antología poética-.
Además, el teatro no sólo se trata de vender, también de sentir, vivir, resignificar la realidad -sobre todo en Tlaxcala-, aprender, y mil virtudes más que un objetivo comercial.
En el caso de que dicho carros de turistas llegaran, no sólo se debe visibilizar el trabajo de la compañía, también la trayectoria de grupos teatreros a lo largo y ancho del estado y de los años.
De vuelta a la reunión, el gremio solicitó el proyecto por escrito con un plan de trabajo, objetivo, desglose de producción y honorarios a actrices, actores y creativos. Pero el maestro afirmó no tener ni idea de cómo hacer el proceso.
Tampoco tiene noción alguna -según asistentes- de cómo abordar una pieza teatral, escrita hace más de 50 años, con perspectiva de género y problemas sociales contemporáneos. Los problemas de la Tlaxcala de N. Lira no son ni cerca a los de hoy.
Propuestas de adiciones a la convocatoria y estatutos de la compañía
Artistas, propusieron un protocolo que aplique filtros para eliminar a violentadores y agresores en el ámbito teatral.
De igual forma, exhortaron a la revisión completa y exhaustiva de la convocatoria para garantizar que los aspirantes cuenten con garantías laborales congruentes al pertenecer a una compañía estatal de teatro, con salario tabulado, justo y estable.
No hay ninguna clase de seguro médico por lesiones en ensayos o en escena.
Por dar un ejemplo de las dignificaciones al trabajo artístico teatral, la Compañía Nacional de Teatro en su convocatoria asegura 10 becas mensuales de 40, 35, 30, y 25 mil pesos a ganadores. Estos, integrarán un elenco estable y equipo de coordinadores de talleres.
La convocatoria está abierta a actrices y actores de número; artistas de más de 60 años y trayectoria mayor a 30; y categorías A, B, C, D, para artistas con trayectorias superiores a 30, 20, 10 y de 1 a 9 años.
Y aunque Tlaxcala -quizá- no cuente con el recurso suficiente para tales cantidades, sí puede otorgar un salario digno y justo de acuerdo con la trayectoria de las actrices y actores, así como coordinadores, directores y equipo técnico.
De igual forma, la falta de apoyo a las agrupaciones locales sigue sin ver la luz de escena. Mientras otros reciben aclamaciones y flashes para la foto oficial.
«La convocatoria es ambigua, con imposición y sin diversidad», Samantha Moreno (Imprudentes Teatro)
Para Samantha Moreno, integrante de la compañía tlaxcalteca Imprudentes Teatro que ha ganado diversos reconocimientos y participaciones en la Muestra Estatal de Teatro, así como relevancia a nivel regional en el país, considera que la Secretaria de Cultura ha impuesto el cómo de la compañía. Y que las audiciones estén abiertas al público evidencia la falta de conciencia de las necesidades la comunidad teatral. Pues la compañía debería adecuarse a ellas, no al revés.
Así mismo, la convocatoria solicita presentar un monólogo y cantar. Sin tener claro -una vez más- la retribución económica.
«Sí creo que en el punto donde dice que busca dignificar el arte, me parece que queda fallando», comentó.
Agregó que no se está dignificando desde la consulta a la comunidad teatral, ni al tomarlos en cuenta para formar parte de la toma de decisiones de la compañía, pues actrices y actores han trabajado en las convocatorias.
Finalmente, puntualizó que la organización de la compañía permanece ambigua, con imposición y sin diversidad como se prometió, pues las necesidades del teatro en Tlaxcala son variantes.
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