El estado de “alerta” puede ser constante mientras se camina por las calles de Tlaxcala. Se trata de esa sensación de inseguridad que se activa debido a que hay muchas cosas de las cuales cuidarse y que incrementa cuando llega el momento de cruzar alguna de las calles de esta ciudad.
Con la intención de brindar algo de seguridad vial, en 2018, el Ayuntamiento de Tlaxcala instaló semáforos nuevos en algunos puntos de la ciudad, entre ellos, en el crucero de las Tres Fuentes, conocido como “El Trébolito”. En esta zona en específico se colocaron cinco semáforos, de los cuales dos son para peatones.
Este crucero es uno de los más conflictivos para ciclistas y peatones, ya que conecta la zona de la central de autobuses, la zona del hospital general y el centro de la ciudad Tlaxcalteca.
Por lo tanto, ¿esta acción pública de infraestructura peatonal garantiza la seguridad de los peatones y ciclistas? Tristemente… No.
Para escribir al respecto, se estuvo monitoreando este crucero por poco más de un mes. Desde el día 1, y hasta la fecha, los semáforos peatonales están sin funcionar, pues siempre están en luz roja, señalando un alto total al peatón.
Durante las observaciones, hubo personas que esperaban lapsos de más de diez minutos para cruzar la calle, pues antes tenían que percatarse de que algo andaba mal con los semáforos peatonales y de que éstos nunca pondrían su luz en verde, en ese momento caían en cuenta de que tendrían que “arreglárselas” con el tráfico vehicular para llegar al otro lado de la calle.
Entonces, ¿qué pasa con el seguimiento y monitoreo de este tipo de acciones públicas “a favor” de los usuarios más vulnerables que transitan por las calles de la ciudad?
Cabe mencionar que, en este crucero, de las cinco intersecciones que hay, los dos semáforos peatonales sólo “sirven” para una de ellas, quedando sin equipamiento peatonal el resto de la zona.
De igual manera, se suma el hecho de que las banquetas carecen de un diseño inclusivo universal y carecen totalmente de balizamiento vial.
No obstante, estas intervenciones pueden mejorar, puesto que tienen la intención de salvaguardar a los más vulnerables que transitan por las calles, lamentablemente, en la práctica, terminan favoreciendo más el dominio del automóvil en la ciudad.
Un criterio que ha tomado relevancia en los últimos años a nivel mundial es que al contar con más y mejor infraestructura peatonal, se genera inclusión y calidad de vida para todos los habitantes que transitan por nuestra ciudad.
A pesar de ello, aún es poco el interés de las autoridades por invertir y mejorar los espacios clave para la movilidad y conectividad de las ciudades de manera integral y segura, ya que muchas de las acciones e intervenciones ejecutadas suelen terminar siendo parte de un rompecabezas donde las piezas nunca terminan de encajar.