Calpulalpan, Tlax. En Twitter el usuario Tlatoani_Cuahtemoc compartió una fotografía de una vasija de cerámica prehispánica tlaxcalteca que comparte una similitud interesante con la representación del coronavirus, tweet que generó comentarios curiosos sobre el posible conocimiento de los tlaxcaltecas sobre la pandemia que estamos viviendo.
Tal vez nuestros antepasados nos están mandando un mensaje y tenemos la solución para el #Coronavirus 🍻🍺😏 #Salud
— Bigotes Blancos (@BigotesBlancos) March 12, 2020
Más allá de esas afirmaciones que apelan a nuestra identidad, en Escenario Tlaxcala intentamos averiguar más de esta joya que nos regala un paralelismo con la historia.
Si bien, no podemos decir que el Tlaxcala prehispánico tenía conocimiento del coronavirus y que se sabía que en 2020 el Covid-19 desataría una pandemia en el mundo, lo que podemos rescatar es el aspecto histórico del contexto en donde esta vasija fue hecha.
Se trata de un recipiente que servía para almacenar pulque y que fue descubierta en Tecoaque, Sultepec, en el municipio de Calpulalpan. De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Tecoaque proviene del vocablo náhuatl que significa “lugar en donde se comieron a los señores o dioses”. Y es que de acuerdo con las fechas, antes de la conquista española el sitio era llamado Zultepec, por lo que, en el año 2001, el Dr. Enrique Martínez Vargas propuso el cambio de nombre de “Tecoaque” a “Zultepec”.
Este lugar jugó un papel importante dentro de las rutas comerciales dominadas a lo largo del tiempo por Teotihuacán, Texcoco y Tenochtitlán. Pero por lo que realmente destaca entre los historiadores es que se trató del espacio en donde fue capturada una caravana española que formó parte de la expedición de Pánfilo de Narváez, quien tenía la encomienda de aprehender a Hernán Cortez.
Esto lo confirman restos óseos de hace 700 años encontrados de hombres, mujeres y niños españoles, negros y mulatos que formaban parte de esa caravana y que llevaban consigo armas europeas.
De acuerdo con información del portal, Tlaxcala Ni te Imaginas… Descúbrelo, Tecoaque-Zultepec lo conforman 15 estructuras distribuidas en un centro ceremonial con cuatro templos y un área habitacional.

Pero algo que resulta todavía más interesante, es que estos españoles interceptados fueron luego acercados «al mundo mítico religioso mesoamericano mediante diversas ceremonias relacionadas con el calendario religioso nahua», esto de acuerdo con un artículo publicado en la revista Antropología Mexicana.
De acuerdo a investigaciones realizadas por el INAH, de este episodio que aconteció en 1520 y del que todavía se conservan restos materiales de la arquitectura y vestigios asociados a las formas de resistencia que presentaron los indígenas del asentamiento a la conquista de los europeos y sus aliados, se ha podido concluir que el lugar no contaba con un espacio como prisión, y menos para albergar a más de 350 personas cautivas, por lo que tuvieron que habilitar las casas de personas importantes de la comunidad.
Las exploraciones han permitido identificar restos de un esqueleto femenino con filiación europea «que después del sacrificio fue llevado al aposento, el cual era adecuado para la manipulación cultural pos mortem de los cadáveres, de manera especial para la extracción de huesos largos, posiblemente para la obtención de los llamados “huesos trofeo” apreciados por los guerreros».
Esta vasija prehispánica, más allá de hacernos pensar en el Covid-19 por la semejanza con la representación del virus, es un vestigio de historia que conecta con uno de los capítulos de guerra de la Tlaxcala prehispánica.
Algunos consideran que este instrumento puede ser la representación de una penca. Actualmente la vasija se encuentra en el Museo Nacional de Antropología.
No es #coronavirus, #CVID19 #COVID2019 , es una vasija de cerámica para almacenar pulque. De #Tlaxcala. Representa el cactus del maguey, con sus brotes cortados. #México pic.twitter.com/jxAPHwuNZI
— Agustín Fernández Mallo (@FdezMallo) March 12, 2020

