- De acuerdo con datos del INEGI en Tlaxcala hay 27,174 personas mayores de 3 años de edad que hablan alguna lengua indígena; de ellos 23,171 personas hablan náhuatl. En la entidad habitamos 1.343 millones de tlaxcaltecas, lo que representa la población que habla náhuatl es aproximadamente el 1.5% de la población; a pesar de ser un estado conformado principalmente por comunidades rurales.
Ante esta situación Itsel Martínez tuvo la iniciativa de realizar el proyecto El Gato Panadero el cual consiste en incentivar a la población tlaxcalteca a hablar náhuatl a través de uno de los bocados más representativos de México: El pan.
- El gato panadero es el proyecto ganador de una iniciativa nacional del Colectivo Kybernus. Esta idea nació a partir de mis estudios por Europa, en donde percibí que la mayoría de los negocios tenían sus cárteles en dos idiomas: el oficial y otros dos, en ese momento pensé que era un desperdicio que en México, teniendo más 68 lenguas originarias; todos los letreros o las diversas formas de comunicarnos en la calle sea a través del español.
Para poder tener mejores cimientos acerca del aprendizaje de las lenguas originarias; el proyecto El Gato Panadero está basado en la glotodidáctica, que es el estudio de las lenguas de manera didáctica e informativa. Durante su estancia por Italia, Itsel pudo desarrollar de mejor manera el proyecto de abrir un centro de lenguas; sin embargo, para el caso de Tlaxcala, la lengua nativa que más predomina es el náhuatl con sus variantes. De ahí la importancia de crear un espacio donde se pudiera aprender náhuatl de manera cotidiana y consumir un producto que la gente todos los días disfruta.
Me acerqué al náhuatl como resultado de mi experiencia de ser extranjera, de ser tlaxcalteca en un país y un contexto completamente diferente. La panadería es un pretexto para que la gente de manera didáctica interiorice la lengua náhuatl.
¿Cómo funciona la el gato panadero? Como el aprendizaje de la lengua náhuatl es la base de este proyecto, por cada vez que los consumidores lean un cartel o digan una frase en náhuatl sin equivocarse; se les estará obsequiando una pieza de pan.
La apertura será en próximos días en calle Zitlalpopocatl, número 5, en el centro de la capital.
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