Tlaxcala, Tlax. En la última Encuesta Nacional sobre la Discriminación en México presentada el año pasado, se detalló el nivel de discriminación que existe en la entidad tlaxcalteca figurando entre los primero 10 con los índices más altos en discriminación por preferencias sexuales.
La encuesta se realiza en un periodo de un año en todo el país con una muestra de 31 mil 101 viviendas, mismas que se realizan a personas mayores de 18 años y que se encarga de ejecutar el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en conjunto con el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED).
En la información obtenida sobresalió el Estado de Tlaxcala con los índices más altos junto Chiapas, Veracruz, Guerrero, Tabasco y Oaxaca con personas que declararon haber sufrido de algún tipo de discriminación por sus preferencias sexuales.
El nivel de discriminación en general y en sus diferentes modalidades en Tlaxcala es del 21.4%, sin embargo el caso con los índices más grandes de personas que fueron rechazadas, violentadas o discriminadas es por el tema de su preferencia sexual.
El 19% de la población total heterosexual declaro haber sido discriminada por otras personas a pesar de que el discriminador no supiera la realidad de su preferencia sexual, sin embargo en el tema de personas trans, gays y lesbianas el porcentaje incremento a un 68.9% de personas discriminadas de ese sector social.
El grado de discriminación por parte de mujeres es del 41%, mientras que el de los hombres es del 59%, el 70% de las personas encuestadas declararon “que no justifica que dos personas del mismo sexo vivan juntas como pareja”.
A nivel nacional los índices de discriminación se encuentran con un 20.2% de la población mayor a 18, mismas que declaran haber sufrido algún tipo de discriminación, siendo por sus preferencia sexuales el principal motivo seguido de la forma de vestir o arreglo personal, el peso o estatura y las creencias religiosas.
En el tema de preferencias sexuales más del 30% de mujeres y hombres mencionaron que no compartirían un cuarto con unas personas trans, gays o lesbiana, al igual que con una personas con VIH/SIDA, porcentaje que representa menos de la mitad que lo que sucede en Tlaxcala.