La administración Trump ha intensificado las medidas para evitar que migrantes mexicanos intenten regresar a Estados Unidos. Como parte de esta estrategia, migrantes indocumentados han sido deportados al sur de México en vuelos organizados por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Hasta la fecha, se han registrado 14 vuelos con un total de mil 650 migrantes indocumentados enviados lejos de la frontera.
Deportaciones vía aérea para evitar reingresos
Desde la llegada de Trump a la presidencia, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza ha optado por trasladar a los migrantes mexicanos en avión en lugar de regresarlos en autobús a través del río Grande/Bravo. Esta medida tiene como objetivo dificultar su retorno a la frontera e impedir que intenten cruzar de nuevo de manera ilegal.
Alivio para la Patrulla Fronteriza
El traslado de migrantes al sur de México busca reducir la presión sobre la Patrulla Fronteriza y los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). “Al expulsar a los migrantes y repatriarlos lejos de la región fronteriza, se previenen nuevos intentos de cruce ilegal, se reduce la actividad ilícita transfronteriza y se permite a nuestras fuerzas del orden aprovechar todos los recursos para evitar que criminales y contrabando peligroso entren en nuestro país y comunidades”, señaló un comunicado de la Oficina de Prensa y Cultura del Consulado General de Estados Unidos en Ciudad Juárez.
Más de mil migrantes detenidos en la frontera
De acuerdo con los datos proporcionados, mil 308 migrantes indocumentados de los deportados fueron detenidos en la frontera sur de Estados Unidos. Los vuelos de expulsión tienen como destino el sur de México, cerca de la frontera con Guatemala, una medida que, según el DHS, busca reforzar la política de “deportación inmediata y permanente”.
Estrategia de control migratorio
El gobierno estadounidense ha señalado que está utilizando todos sus recursos federales y colaboraciones estatales, incluyendo el Departamento de Estado, el Departamento de Seguridad Nacional, el Departamento de Justicia y el Departamento de Defensa, para garantizar que los migrantes indocumentados sean arrestados, procesados y expulsados de forma inmediata.
Advertencia a los migrantes
Las autoridades estadounidenses han dejado claro que cualquier persona que cruce la frontera ilegalmente será deportada. “Entrar ilegalmente no es un proceso de prueba y error. Ser deportado es definitivo: no te daremos la oportunidad de intentarlo otro día o en unas horas”, reiteraron en un comunicado.