Tlaxcala, Tlax. A finales de julio, se decretó que los estudiantes del nivel básico tendrían un regreso a clases de manera digital. Esto a través de clase por televisión y de plataformas en internet, donde los profesores guiarían los procesos de aprendizaje de los alumnos. Es así que esta nueva modalidad ha mostrado lados de este proceso de enseñanza, evidenciando problemas que viene arrastrando el Estado y el país: desigualdad, pobreza y un retraso tecnológico en general.
Retraso tecnológico
De acuerdo con el último índice de progreso social en México publicado este 2020, ubica a Tlaxcala como la tercera entidad con menos porcentaje de hogares con Internet en casa. Con un 34.1 % de cobertura, Tlaxcala se posiciona muy por debajo de entidades como Sonora, Baja California Sur, Quintana Roo, Baja California y Nuevo León. Entidades que tienen una cobertura de entre 70% y 82% de cobertura de Internet en sus hogares.
Así mismo, el Sistema Nacional de Innovación (SIN) refleja una desigualdad tecnológica en el país. Lo que ubica a Tlaxcala, Hidalgo y Puebla con un avanzado retraso tecnológico y analfabetismo tecnológico en comparación con entidades de la misma región como Ciudad de México y Estado de México.
El analfabetismo tecnológico se refiere a la incapacidad de manejar tecnologías de información y comunicación emergentes, así como las ya utilizada en la región. Es así que este regreso a clases con las nuevas modalidades tecnológicas, ponen en desventaja a las entidades.
Desigualdad
Tlaxcala cuenta con un promedio de 332 mil hogares en todo el Estado, según la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información. De estos el 34.2% cuenta con servicio de internet, corroborando lo emitido por el índice de progreso social. Sin embargo, este informe muestra el gran índice de desigualdad que hay en el Estado.
Del total de hogares con internet, el 97.5% se centra en las zonas urbanas. Es decir, que a nivel general, solo 4 de cada 10 hogares en Tlaxcala cuenta con internet en su casa y de estos es casi nulo el número de hogares que pertenecen al sector rural.
El caso de la accesibilidad a la televisión es igual. Aunque casi el 90% de los hogares en Tlaxcala cuentan con televisión, el 10% restante pertenece a las zonas rurales, donde según el Instituto Federal de Telecomunicaciones (ift) ni siquiera llegan las señales de televisión abierta.
Pobreza
El tema de pobreza y pobreza extrema se convierte en el principal factor para que se susciten las dos problemáticas anteriores. De acuerdo con el último informe del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), Tlaxcala ocupa el quinto lugar del país en pobreza infantil. Esto visto en números específicos, refleja a más de 280 mil niños de entre 0 y 17 años en situación de marginación.
Zonas rurales: el rostro marginado de la educación en Tlaxcala
Como las cifras lo muestran, en zonas rurales es donde los problemas para la educación con la nueva modalidad se verán reflejados. Carlos es un profesor de la primaria Rural Francisco Sarabia en Calpulalpan, señala que desde antes de la pandemia la deserción escolar y las faltas constantes de alumnos por problemas económicos eran una constante.
Además, la falta de recursos por la propia institución y el poco apoyo de los gobierno locales han provocado que la educación en la localidad tenga pocos avances. Durante el ciclo escolar pasado, las nuevas formas de enseñanza «fueron hasta cierto punto imposibles de implementar, derivado de las condiciones de sus alumnos», compartió.
Para este regreso a clases, su grupo de tercer año cuenta con un total de 17 alumnos. De ellos, el primer día de clases solo pudo interactuar con 6. Para el segundo día, el número de alumnos con los que pudo interactuar incrementó a 12.
Sin embargo. señala que las dificultades en cuestión de conexión a Internet fueron muy evidentes ya que los padres que no contaban con internet en casa, lo hacían con su “datos” por lo que “la señal hacía de las suyas”.
Si bien, entre él y sus compañeros profesores han buscado la manera de agilizar el proceso de interacción para que los padres no gasten. Sin embargo, a pesar de que hay disponibilidad de padres para ayudar a sus hijos, al final dice que “el grado de aprendizaje de los niños y niñas no tendrá la calidad que se merecen”.
