Tlaxcala, Tlax. En el temprano periodo colonial, los miembros de la elite indígena del México central tenían un gran interés en la genealogía y en la expresión de ella. En Tlaxcala del siglo XVI, una cantidad aparentemente desproporcionada de genealogías pictóricas fueron elaboradas.
Estas expresiones pictóricas fueron obras de náhuatl-hablantes o nahuas, artistas nativos. Que elaboraban cuadros y dibujos con información personal y genealógica que se extendía hacia tiempos anteriores en el pasado local; como lo es el códice de La genealogía de Zolín ubicada en la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.
¿Pero qué es el Códice de Zolín?
Es una hoja de papel de maguey en la que se registró una genealogía compuesta por 14 personas. Inicia en la parte superior con un folio que muestra una casa estilizada. Allí tiene una fachada cuadrada de ladrillo que conduce a dos postes de madera que soportan un dintel sobre una apertura en el edificio.
El personaje principal se encuentra dentro de la casa en la parte superior del códice .Se identifica como un varón por su penacho, su postura y su vestimenta. Además del penacho, lleva una tilma – un tipo de prenda exterior usada por hombres – que cubre su torso y sus rodillas, que están recogidas hacia su pecho; este señor tiene como nombre jeroglífico, una ave identificada como Zolín (codorniz).
Del señor Zolín sale una línea que se une a una mujer que viste un huipil de cuadros rojos y frente a ella aparece un hombre. Debajo de esta pareja hay dos personas más, todas unidas por medio de líneas y acompañadas de un glifo antroponímico. Del total de los personajes, cuatro son mujeres y diez hombre
Aunque estas ligas son a menudo ambiguas, podemos afirmar con certeza que las otras personas representadas en esta genealogía son los “retoños”, de uno u otro tipo, de este matrimonio; incluidos, definitivamente, sus hijos y nietos.
¿Cómo te quedo el ojo?
